Por dos días había decidido terminar con este blog y restringir su contenido a historias que transcurran en Buenos Aires, donde vivo desde hace cuatro días. Lo pensé mejor, luego que recibí un consejo del experimentado periodista Diego Jemio, quien me recibe en su casa y ahora está en Madrid.
Diego está en lo cierto. Fue un error intentar matar a AJÁ, que había permitido interesantes debates sobre periodismo y música, y que integraba la red de reporteros tucumanos bloggers. Por eso decidí volver atrás, pero ahora arranco con tarea doble: AJÁ y Porteño de Ley, mi nuevo blog, que buscará descifrar el gen de los residentes de la Capital Federal.
Los invito a mi nuevo sitio, y les agradezco a quienes alguna vez se dieron una vuelta por acá. Pasen y vean.
Sin fecha
Hace 11 meses
2 comentarios:
Celebro la resurrección de AJÁ. Como vos decís, los debates se habrían perdido si se moría el blog. Vos, mejor que nadie, lograste dar lugar a debates buenísimos y muy enriquecedores, muchas veces, escribiendo de entrada sólo diez líneas. Ojo, también seré seguidor de tu otro blog, no te queden dudas. Es más, ya está entre mis blogs amigos. Un abrazo, hermano.
Gracias Seba por la onda. Siempre un copado, vos. Es un gusto leerte. Posta
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